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El Castillo de Blarney y su piedra elocuente

Uno de los castillos irlandeses más famosos es el castillo de Blarney, básicamente en este castillo verás llegar visitantes de todo el mundo para ver la famosa Blarney Stone (la piedra de Blarney). Dice la leyenda, que cualquiera que bese la piedra de Blarney conseguirá el don de la elocuencia. Por tanto son decenas las personas que suben hasta lo alto de la torre principal para, por unos segundos, estar con la cabeza al vacio y dar un beso a esta piedra, ganando de una vez por todas el don de la elocuencia.

Pero la piedra de Blarney es quizá un elemento más a añadir a todo el castillo. Dice la leyenda que los poderes elocuentes de la piedra de Blarney provienen de una negociación entre Isabel I y Lord Blarney. La reina inglesa quedó completamente exasperada con las habilidades elocuentes de Lord Blarney, y este a su vez explicaba que eran gracias a que de tanto en cuanto besaba la famosa piedra.

La famosa Blarney Stone

De esta manera, podremos subir por unas alegres escaleras a través de la torre para llegar justo a la zona donde se encuentra la piedra. La Blarney Stone está situada en un muro, bajo los bastiones del Castillo, y para poder besarla se debe hacer un poco de ejercicio. Básicamente, deberemos ayudarnos de unas barandillas y de una persona (que siempre está allí), para jugar con la gravedad y poner nuestra cabeza hacia abajo, suspendido en el aire podremos fácilmente darle el beso a la piedra.

Aunque la descripción parece algo compleja y peligrosa, debes pensar que son decenas las personas que lo hacen cada día, y la media de edad no es que sea precisamente baja. Por tanto no notarás absolutamente ningún tipo de vértigo, lo más complicado es alzarte una vez besada la piedra. Una recomendación extra: no mires demasiado la piedra antes de besarla, ya que el color de la piedra está bastante cambiado, puedes echar a la imaginación el motivo del cambio del color.

Pero no solo la piedra de Blarney es el principal atractivo del Castillo, también disfrutarás de unos jardines ideales para pasear, con grandes arboledas y caminos qué harán tus delicias. Depende de la época del año en la que visites el castillo de Blarney podrás ver también múltiples flores de todos los colores. Una vez acabada la visita siempre podemos tener una foto de recuerdo de como hemos besado a la piedra, o simplemente recordar los jardines de sus alrededores, muchas personas opinan que fueron fuente de inspiración para algunas escenas de Harry Potter.

Es un castillo diferente a los otros dos que hemos comentado en el blog: el castillo de Trim y el Rock of Cashel. Quizá es uno de los castillos más divertidos de Irlanda, evidentemente la piedra da mucho juego.