
Las fuentes son parte integral de todas las ciudades, pero no todas se han construido con el expreso objetivo de ser puntos de reunión para grandes eventos, como en este caso.
Construida con motivo de la Exposición Universal el 1928, se trata de una enorme fuente situada en lo alto de un paseo.
La historia de la fuente es curiosa, ya que en el lugar dónde se sitúa simplemente se quería tener un gran espacio para organizar actos y celebraciones, pero una vez acabaron las obras de la exposición, los organizadores consideraron que faltaba algo, y fue cuando el arquitecto Carles Buïgas propuso una «obra colosal, atrevida y costosa», esa la fuente mágica.
Luz, agua, color… es el lugar dónde los habitantes de Barcelona (y cada vez más turistas) celebran la entrada de año nuevo, y se realiza el popular piromusical de final de fiesta mayor de la ciudad.
Un espectáculo increíble, dónde la orquestra de la ciudad se une con la propia fuente y se realiza un espectáculo único.
La fuente, además, está activada en muchos otros días especiales del año.
La mayoría de rincones de Barcelona están repletos de historia, y muchas veces una historia represiva por parte de las autoridades españolas, la Font Màgica tampoco se libra. En el año 2010 se reconstruyeron las 4 columnas del arquitecto Puig i Cadafalch.
Eran unas columnas que representan las 4 barras de la bandera de Cataluña, que se construyeron en ese lugar en el momento de su construcción, pero que fueron destruidas en el año 1928 por la dictadura del momento.
Por la presión vecinal fueron reconstruidas en el año 2010, reparando de nuevo otro acto de represión sobre los habitantes de la ciudad.