
Quiero revindicar la Comunidad de Extremadura dando un paseo histórico por sus ciudades, una comunidad casi olvidada que alberga grandes riquezas para el viajero o el turismo. Quiero empezar por su capital, Mérida.
Un pequeño apunte histórico sobre Mérida
Fue la antigua capital Lusitana y una de las ciudades más brillantes del Imperio Romano, época de la cual conserva un singular legado artístico. En la actualidad, en 1983 se estableció como Capital de la Comunidad de Extremadura, vive un proceso de recuperación en todas sus vertientes.
El siglo La fundación de Augusta Emerita tiene lugar en el 25 a C. por deseo expreso del emperador romano Augusto para satisfacer a los soldados licenciados de las guerras cántabras, proporcionándoles las fértiles tierras de la rica vega del Guadiana. Pasado los siglos, el deterioro de la ciudad se inicia por la invasión musulmana, ya que el enfrentamiento con el poder de Córdoba provocaron duras depresiones y la capital se trasladó a Badajoz. En un nivel eclesiástico corrió la misma suerte cuando el Rey Alfonso IX cambio su sede episcopal y la traslado a Santiago de Compostela y entrego la ciudad a los caballeros de la Orden de Santiago, a partir de ese momento cae en una agonía.
Mérida y sus principales lugares de visita
Lo más destacado de esta ciudad, Mérida, es su teatro romano, un espacio por si solo que evoca el esplendor conseguido de Augusta Emerita, construido por Marco Agripa, gran benefactor de la ciudad, su construcción acabo en el año 15 a C. Fue reformada sobre el 105, con una capacidad de aforo de 6000 personas, y se mantuvo su uso hasta el siglo IV. Tras un proceso de deterioro significativo, fue restaurada en el siglo XX y actualmente se celebra el Festival de Teatro Clásico.
Museo Nacional de Arte Romano. Rafael Moneo, arquitecto de gran prestigio, fue el encargado de diseñar este edificio funcional, cómodo y luminoso, inspirado en la arquitectura romana. En el edificio contiguo,se conserva una cripta, done se pueden apreciar tumbas, muros de casas y tramos de calzadas, indispensables para tomar referencia de cómo y de qué manera funcionaba una civilización muy avanzada entonces.
De visita obligada es la Iglesia de Santa Eulalia, templo construido en los Siglos XIII y XIV, sobre una basílica del Siclo V, en la que se veneran las reliquias de la Santa. También es una visita obligada el convento de Santa Clara y el Museo de Arte Visigodo.
La celebración de la Semana Santa, esta declarada de Interés Turístico Regional y resulta de lo mas emotiva. En los alrededores del Museo Nacional de Arte Romano, infinidad de tiendas ubicadas en el entorno, pueden transmitir al viajero recuerdos tanto gastronómicos como artesanos, especial interés la cerámica hecha en Badajoz, Salvatierra de los Barros.
Los productos gastronómicos, tales como la chacinería, zarandollos, cojondongos y jilimojas, de obligada degustación, el cordero asado y como no, el jamón de la comarca.