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Alcalá de Guadaíra o Alcalá de los Panaderos

Alcalá de Guadaíra es un municipio de la provincia de Sevilla a orillas del río Guadaíra, en la comunidad autónoma de Andalucía. Está muy cerca de la capital, Sevilla, y por eso con los años se ha convertido en una ciudad dormitorio, sobretodo las afueras, aunque también es un núcleo importante de servicios. Su pasado es importante aunque hoy esté eclipsada por la capital de la provincia ten cercana.

Un poco de historia de Alcalá de Guadaíra

Aunque hay restos arqueológicos dispersos pertenecientes a la prehistoria, la población de Alcalá se vuelve importante cunado sus moradores deciden reunirse en un centro fortificado. Con la llegada de los romanos, el asentamiento tuvo una gran influencia de Hispalis. Además, era una zona muy fértil gracias a la proximidad con el río hecho que la convirtió en la abastecedora de alimentos de la capital.

Fue en la época árabe que la ciudad adquirió verdadera importancia. Para empezar, su nombre proviene del árabe: alcalá significa fortaleza y Guadaíra (wadi-ira) significa “el valle del río Ayra”. Está levantada, la ciudad, en un cruce de caminos y formaba parte del cinturón defensivo de la vecina Hispalis.

En época medieval y después de la reconquista es cuando Alcalá alcanza la máxima importancia ya que se la considera villa por primera vez, privilegio otorgado por el rey. Además, deja de ser un mero enclave militar para pasar a tener entidad propia y regirse por sus propios intereses.

Monumentos que visitar el Alcalá de Guadaíra

Sin duda alguna, el monumento más destacable de Alcalá es su castillo. De ahí proviene su nombre. Se trata de una imponente fortificación militar en lo alto de un cerro donde probablemente ya se asentó algún pueblo de una tribu íbera. La fortaleza es el resultado de los años ya que lo que en principio empezó siendo un pequeña fortaleza, con el pasar de los tiempos se fue engrandeciendo y añadiendo nuevas estructuras. El castillo propiamente dicho es de origen árabe aunque en épocas posteriores se hicieron importantes reformas. Las demás edificaciones son de después de la reconquista cuando se decidió engrandecer el recinto y mejorarlo para la defensa además de caber dentro de él la ciudad medieval de Alcalá. Hoy en día lo que se puede ver es una amalgama de edificios mezclados que podían tener desde uso defensivo hasta viviendas para las personas o personal del castillo. La importancia de este radica en que era un baluarte defensivo precedente a Sevilla respecto a la frontera del reino de Granada.

Dentro de la ciudad nueva se pueden visitar numerosos edificios antiguos casi todos construidos entre los siglos XIV y XV. Destacan las iglesias de Santiago el Mayor, San Sebastián y San Miguel, de estilo mudéjar.
Como curiosidad hay que añadir que el ayuntamiento de Alcalá de Guadaíra decidió hace más de una década cambiar la acentuación del nombre Guadaíra ya que antes se escribía sin acento. Esto se basó en el nombre que usaban los lugareños de la zona para referirse al río que ya de muy antiguo se pronunciaba con acento tónico en la i. Además, en otros lugares cercanos al río Guadaíra, la gente coloca este acento. Conviene recordarlo ya que hoy en día la ciudad está muy en boca de los tertulianos que aparecen en televisión.